ALQUILER DE VEHÍCULOS

Cuando nos disponemos a viajar, en especial si es fuera de nuestro país, prefiero el transporte público para desplazarme dentro del destino de vacaciones. Para mí es más cómodo, no hay duda de que es más ecológico y me permite sentirme más cercana, más integrada en el lugar que he ido a conocer. No obstante, no siempre es factible esta opción, bien sea por distancias o por el placer de la conducción a menudo nos vemos en la tesitura de alquilar un vehículo.


Imagen @ Flickr Michelle Tribe

Da lo mismo que sea una furgoneta de mudanzas que una roulotte, a la hora de alquilar un vehículo siempre es recomendable tener en cuenta unos consejos.

Aprovéchate de internet: No está ahí sólo para jugar online y leerme, también puedes aprovechar las ofertas tan suculentas que hay por la red. Sobre todo si tienes que viajar fuera, pues los alquileres en aeropuertos suelen ser mucho más caros, eso sí, lee siempre bien las condiciones, para evitar sustos.

La reserva anticipada será tu gran aliada, evitarás precios desorbitados de última hora, o peor aún, el verte sin coche disponible para los días que lo necesitas. Si además lo dejas pagado por adelantado evitarás que te insistan con extras innecesarios y si viajas al extranjero además no tendrás que fijar las condiciones en otro idioma con sus consecuentes "posibles malentendidos".

Aunque no está mal tener en cuenta las opciones de los extras : piénsate y avisa con tiempo si necesitaras sillas para los niños, manos libres, cadenas para nieve, o incluso GPS.

Cuando llegues a recoger el vehículo lleva preparados los documentos que vayas a necesitar, recuerda que siempre será más sencillo si el nombre de la persona que hizo la reserva coincide con el del carnet de conducir y con el de la tarjeta de crédito de la reserva. Más que nada por simplificar y ahorrarte colas y esperas innecesarias.

Revisa bien el estado del vehículo, si tiene algún arañazo, si funcionan correctamente las luces, ruedas, frenos . . . y deja constancia de ello para evitarte no sólo el peligro en carretera, si no el que tengas que cargar con los gastos de un desperfecto que ya traía el coche.

Por lo demás, no te quedes con dudas, pregunta todo aquello que quieras saber: si no sabes qué cobertura tiene el seguro, si tiene franquicia, si puede haber un conductor adiccional . . . pregúntalo, siempre es mejor prevenir que curar.